Las comunidades indígenas Utucuro, Nueva Ahuaypa y Puerto Grau del pueblo Shipibo Konibo, ubicadas en los distritos de Masisea e Iparía, han logrado mantener en el tiempo sus prácticas ancestrales agrícolas para cultivar plátanos bellacos sin agroquímicos y comercializarlos a precio justo.
Este emprendimiento indígena se realiza en 300 hectáreas destinadas al cultivo de plátano bellaco, logrando una producción mensual entre 3 000 a 5 000 racimos de manera sostenible con la Amazonía, protegiendo sus bosques.
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En su comercialización, cuentan con compradores directos en la ciudad de Lima que se encargan de colocar los plátanos en importantes mercados de la capital como La Parada, Huamantanga, entre otros.
Esta comercialización directa elimina a los acopiadores de la cadena de venta, logrando mejores precios para sus plátanos, lo que se refleja en mayores ingresos. Asimismo, abastecen de este alimento amazónico a restaurantes y habitantes de Pucallpa, contribuyendo con el desarrollo económico de Ucayali.
Según los comuneros, los rematistas se aprovechan del desconocimiento de los indígenas ofreciéndoles precios demasiado bajos por sus productos. Después estos, los rematan a un precio muy elevados. Huayna cuenta que, mediante la cooperativa ganarán más de 3 soles por racimo de plátano, según la estación del año.
Los líderes de las comunidades buscan cortar ese cordón umbilical que los atan a los rematistas. Por ese motivo, es que vienen siendo capacitados en diversas técnicas de producción para que directamente negocien con el consumidor final y no regateen sus productos.